Guillermo M. Schrem
La pandemia nos ha pillado, de frente, de espaldas y de lado. Un grupo de amigos se reúnen en un caserón, donde no falta el vino y la buena mesa, amén que algún otro fantasma e, igual que en el Decamerón, dan rienda suelta a todas las historias que les vienen a la memoria, y todo ello entre pasillos interminables, cambios de guardia centenarios y nocturnos, así como cámaras secretas que se abren al menor toque de imaginación. El amanecer nos traerá un nuevo día si no nos toca vivir en una noche eterna.