Manuel Tejedor Rábano
Si la poesía aposenta al ser entre el mundo y las alturas, este libro ofrece tal lugar. Introduce al lector en una zona única y llena de sentidos, algunos perceptibles y otros todavía inadvertidos. Además, el autor los guía con un humor lúcido y una imaginación sutil.Por aquello de atar en la tierra y en el cielo, en este libro, Tejedor Rábano tensa la cuerda y ata nudos en los extremos, desde el nacimiento hasta una muerte imaginada. Con una visión singular, distingue las atrocidades mundanas, la presencia de demonios y aun el andar de Dios.En «El artista», escribió: «El arte es revelación». Mientras el mundo ofrece sus revelaciones, el autor revela su alma con su arte de poeta.